Herbert Marcuse (Berlín 1898-Starnberg 1979) es uno de los representantes más relevantes de la teoría crítica de la denominada Escuela de Francfort, junto con M. Horkheimer y Th. W. Adorno. Nació en el seno de una familia judía asimilada económicamente acomodada. Se doctoró en la Universidad de Friburgo en 1922 con una tesis sobre La novela de artista alemana. De 1929 a 1932 fue asistente de M. Heidegger en la Universidad de Friburgo, con el que trató de realizar su tesis de habilitación con un trabajo titulado Ontología de Hegel y teoría de la historicidad. En ese periodo se esforzó por realizar una mediación entre el planteamiento de Marx y el de Heidegger de cara a devolver su fuerza crítica, inervante de la praxis, a un materialismo histórico reducido por las interpretaciones dominantes en la época a una concepción cientificista y evolucionista de la historia. Tras su frustrado intento de habilitarse con Heidegger (parece que éste, por razones que sólo pueden especularse pero que podrían apuntar a su paulatina derechización en aquellos años, no estaba interesado en habilitar a su discípulo), Marcuse entabla contacto con Horkheimer para incorporarse al Instituto de Investigación Social de Frankfurt. Ingresa en él cuando el Instituto sale al exilio hacia Suiza ante la inminente subida de los nazis al poder a comienzos de 1933. En 1934 Marcuse emigra con el Instituto hacia los Estados Unidos y entabla una estrecha colaboración con Horkheimer en Nueva York. Después de su desvinculación económica del Instituto en 1942, a causa de los problemas materiales de éste, Marcuse va forjándose lentamente una carrera académica en los Estados Unidos que culmina con su nombramiento como catedrático de Politología en la Universidad de San Diego, California, en los años 60. En ese momento ya se había convertido en una figura teórica relevante de la nueva izquierda y del movimiento estudiantil internacional. En esta época trató de poner en diálogo a Marx con Freud para pensar críticamente la forma de vida y la ideología sustentadora del capitalismo desarrollado. En uno de sus viajes a Alemania, invitado por J. Habermas para la realización de actividades académicas, sufre una repentina crisis de salud que lo lleva a la muerte en pocos días. Dentro del grupo de pensadores de la Escuela de Francfort es posiblemente el autor más riguroso filosóficamente (destacan por su alto nivel sus confrontaciones con Hegel, Marx, Freud y Heidegger) y el que asumió más plenamente la vocación práctico-política de la teoría crítica.
Sus obras más relevantes son:
-Ontología de Hegel y teoría de la historicidad, Barcelona, 1976.
-Razón y revolución. Hegel y el surgimiento de la teoría social, Madrid, 1971.
-Eros y civilización, Barcelona, 1984.
-El marxismo soviético, Madrid, 1969.
-El hombre unidimensional, Barcelona, 1984.
-El final de la utopía, Barcelona, 1984.
-Un ensayo sobre la liberación, México, 1975.
-La dimensión estética, Madrid, 2007.